James L. Brooks es un cineasta inteligente. Esa inteligencia la refleja siempre en la manera como escribe sus películas y en la manera como las filma. Aunque con menor calidad que en trabajos anteriores del cineasta, En Spanglish, Brooks reflexiona una vez más sobre el amor, la pareja y la familia; lo hace desde una óptica en la cual sus personajes alcanzan momentos llenos de un humanismo pocas veces explorado con una dosis de inteligente y casi espontánea comicidad.
En Spanglish, se hacen presentes los temas recurrentes a los que Brooks ha hecho alusión a lo largo de su filmografía. Siempre mostrando a mujeres fuertes que sirven como catapulta para iniciar una atrevido viaje intimista al interior de familias y situaciones aparentemente comunes (Como fue el caso de Tears of enderment o la excepcional Broadcast news), Exploraciones hacía el interior de parejas poco convencionales (Caso concreto de As good as it gets) y de familias que atraviesan momentos de Crisis, como es el caso de los Clansky en Spanglish.
Tal parece que Spanglish es una especie de ensalada argumental en donde lo descrito anteriormente se mezcla con ingenio para detenernos en un momento específico de la vida de seres aparentemente viviendo vidas normales, pero llevadas a extremos emocionales, desatando conflictos climáticos y vitales para su existencia. Los Clansky se enfrentan a varias situaciones: Jhon Clansky es un Chef, cuyo éxito significa una pérdida importante de originalidad e independencia en su trabajo. Los elogios de un crítico importante, se convierten en su ruina y vive con una mujer lejana a su problemática personal. Debora Clansky, es el eje sobre el cual girarán todas las emociones de esta película, pero al mismo tiempo, será un eje egocéntrico y completamente obsesionado consigo mismo y con que los demás lleven la vida a su propio antojo. El detonante para los cambios en la Familia Clansky será Flor Moreno, inmigrante mexicana consiente de que su llegada a Estados Unidos es solamente un medio para conseguir una vida mejor para su pequeña hija. Para Flor, lo norteamericano (inglés incluido) es solo un medio para mantener su propia personalidad y las características que la identifican como mexicana, tratando de pasarle éstas a su inteligente hija, quien a su vez es la narradora de esta sencilla historia. Historia siemple en forma, pero muy compleja en cuanto a su fondo.
Destacan las actuaciones de Paz Vega, cuya interpretación de una madre dispuesta a todo por su hija es de alto nivel. Adam Sandler, quien de la mano de Brooks, funge como ese héroe anónimo que toda familia posee, con una caracterización pausada y mesurada, alcanzando tintes dramáticos interesantes y sorpresivos en este actor cuya carrera comenzó en comedias insulsas. Tea Leóni, imprime espectaculares matices a Deborah, su personaje, convirtiéndose en la mujer que provoca los cambios en quienes la rodean, aún esto signifique su propia perdición. Cloros Leachman es ese ángel existente en cada familia, silenciosa y omnipresente, su presencia se agiganta cuando se le necesita y por lo tanto se convierte en indispensable.
Brooks ha hecho una cinta con honestidad, con pocas pretensiones, pero con telarañas sentimentales que la hacen un producto tragicómico de altos vuelos emocionales. Si bien, por momentos el guión parece ser rebasado por la intensidad de las actuaciones, Spanglish es una joyita cuya mayor virtud es mantener un estilo: el de James L. Brooks, y una coherencia argumental del principio hasta el fade out final que se aprecia en pantalla. Es una cinta cuyos mayores logros son: la atinada dirección y, por consiguiente, lo atinado de las actuaciones del bien logrado reparto.
En Spanglish, se hacen presentes los temas recurrentes a los que Brooks ha hecho alusión a lo largo de su filmografía. Siempre mostrando a mujeres fuertes que sirven como catapulta para iniciar una atrevido viaje intimista al interior de familias y situaciones aparentemente comunes (Como fue el caso de Tears of enderment o la excepcional Broadcast news), Exploraciones hacía el interior de parejas poco convencionales (Caso concreto de As good as it gets) y de familias que atraviesan momentos de Crisis, como es el caso de los Clansky en Spanglish.
Tal parece que Spanglish es una especie de ensalada argumental en donde lo descrito anteriormente se mezcla con ingenio para detenernos en un momento específico de la vida de seres aparentemente viviendo vidas normales, pero llevadas a extremos emocionales, desatando conflictos climáticos y vitales para su existencia. Los Clansky se enfrentan a varias situaciones: Jhon Clansky es un Chef, cuyo éxito significa una pérdida importante de originalidad e independencia en su trabajo. Los elogios de un crítico importante, se convierten en su ruina y vive con una mujer lejana a su problemática personal. Debora Clansky, es el eje sobre el cual girarán todas las emociones de esta película, pero al mismo tiempo, será un eje egocéntrico y completamente obsesionado consigo mismo y con que los demás lleven la vida a su propio antojo. El detonante para los cambios en la Familia Clansky será Flor Moreno, inmigrante mexicana consiente de que su llegada a Estados Unidos es solamente un medio para conseguir una vida mejor para su pequeña hija. Para Flor, lo norteamericano (inglés incluido) es solo un medio para mantener su propia personalidad y las características que la identifican como mexicana, tratando de pasarle éstas a su inteligente hija, quien a su vez es la narradora de esta sencilla historia. Historia siemple en forma, pero muy compleja en cuanto a su fondo.
Destacan las actuaciones de Paz Vega, cuya interpretación de una madre dispuesta a todo por su hija es de alto nivel. Adam Sandler, quien de la mano de Brooks, funge como ese héroe anónimo que toda familia posee, con una caracterización pausada y mesurada, alcanzando tintes dramáticos interesantes y sorpresivos en este actor cuya carrera comenzó en comedias insulsas. Tea Leóni, imprime espectaculares matices a Deborah, su personaje, convirtiéndose en la mujer que provoca los cambios en quienes la rodean, aún esto signifique su propia perdición. Cloros Leachman es ese ángel existente en cada familia, silenciosa y omnipresente, su presencia se agiganta cuando se le necesita y por lo tanto se convierte en indispensable.
Brooks ha hecho una cinta con honestidad, con pocas pretensiones, pero con telarañas sentimentales que la hacen un producto tragicómico de altos vuelos emocionales. Si bien, por momentos el guión parece ser rebasado por la intensidad de las actuaciones, Spanglish es una joyita cuya mayor virtud es mantener un estilo: el de James L. Brooks, y una coherencia argumental del principio hasta el fade out final que se aprecia en pantalla. Es una cinta cuyos mayores logros son: la atinada dirección y, por consiguiente, lo atinado de las actuaciones del bien logrado reparto.
2 comentarios:
Bien, me leí tu larguísimo post y aún así no se me antoja la mági-comedia de la mexicana supermana que viene a salvar a la familia gringa que vive en la babosa pk los gringos (por si alguien lo olvida) no tienen valores familiares como nosotros que ya hasta dia de la familia tenemos y que por cierto no sé cuando es. El caso es que en mi neurótica (jeje) forma de verlo ese film podría caerme a un lado del hígado justo debajo de donde me cayó Un día sin mexicanos pues.. por qué? Fácil, me chocan los estereotipos y odio las películas en donde estereotipean a la gente, ¿por qué diablos no pusieron a una mujer irakí?.
Jejjeje..saludos en este frío sabado de sin-dinero-pinche-quincena-eterna del terror.
Lo interesante Janis, es que la película evita precisamente caer en esos estereotipos. La mexicana aquí, es inteliente, segura de si misma y conciente de su realidad d de lo que la rodea. De ahí, mi gusto por el filme, pues también soy reacio a la manera como tradicionalmente ha visto Hollywood a México.
En mi Hígado igual hay un apartado especial para Un Día sin Mexicanos...
Saludos.
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