Hoy 7 de junio se celebra en nuestro país el día de la libertad de expresión.
Afortunadamente ha caído en domingo y no tenemos que ver y escuchar a comunicadores - locales principalmente - felicitarse como si éste fuera su día. La libertad de expresión es un derecho de todos los habitantes del país y no es exclusivo de quienes trabajan en algún medio de comunicación masiva (que dicho sea de paso muchas veces renuncian a ese derecho para privilegiar a la línea que sus empresas de comunicación les dictan).
Pero creo que el día de hoy vale la pena hablar del tema, por que varias notas de prensa publicadas tanto ayer como en las últimas 24 horas han insinuado el hecho de que existe una reacción por parte del sistema ante la iniciativa ciudadana de anular el voto en la próxima elección del cinco de julio. Lo que inició como un pequeño movimento, ha tomado tal fuerza que ha obligado a una reacción en cadena por parte de Partidos, políticos e incluso por parte de la gente del IFE, quienes comienzan a hacer llamados (¿desesperados?) para que la población vote por alguna opción de las presentadas por la partidocracia para competir en la elección.
De acuerdo con esta nota de La Jornada, Consejeros del IFE han iniciado cabildeos con la radio y la TV para evitar que la campaña de anulación del voto se propague por esos medios. Los partidos políticos, también comienzan a sentir que la ciudadanía puede comenzar a rebasarlos y se manifiestan en contra del "voto blanco" . Las declaraciones del Presidente Estatal del PRD, van en concordancia con las que este blog presentó hace un par de días por parte de la secretaria nacional de dicho partido. Supongo que ellos saben realmente lo que la democracia, y para eso hay que mirar lo que han sido sus últimos procesos internos. Y por supuesto llama la atención el hecho de que en este asunto, todos los partidos olvidan sus supuestas diferencias y llaman a votar en la elección.
Pero por si faltara algún otro representante del sistema que se manifiesta en contra de la iniciativa ciudadana, la iglesia Católica ha hecho un llamado a los comunicadores para suspender la campaña de anulación al voto. Es curioso que los más fervientes practicantes del totalitarismo hagan un llamado para evitar al mismo. Una institución anti democrática, no puede me parece opinar sobre el tema pues no lo entiende, ni lo practica.
Por supuesto que no faltan que existan visos de oportunismo político por parte de gente que inmediatamente se asume como promotora de la iniciativa. Pero aún así, creo que no se le puede quitar mérito a un movimiento que ha logrado ya algo muy importante: ha generado un movimiento telúrico en las entrañas del sistema, al grado que éste comienza a agruparse para defenderse a si mismo ante una pequeña pero creciente amenaza ciudadana. La realidad es que juridicamente la campaña quizá no tenga mayores repercusiones, pero en términos simbólicos ha ganado ya: nos ha demostrado que podemos poner a temblar a la partidocracia mexicana, a sus representantes y a otros actores que gozan de los privilegios que nuestro actual sistema político les ha otorgado por demasiado tiempo. En eso se ha avanzado, pero de nada servirá esta pequeña amenaza ciudadana, si no viene acompañada, a partir del 6 de julio de una organización ciudadana que le de un rumbo más concreto al movimiento. De no ser así, se perderá en la poderosa marea que el sistema actual va a lanzar para contrarrestarla.
Hoy Denisse Dresser escribe:
Por ello tendremos que pensar en acciones que contribuyan a sacudir, a presionar, a protestar, a rechazar, a manifestar la inconformidad, a reconfigurar una democracia altamente disfuncional. Por ello habrá que proponer medidas que combatan la inercia y generen incentivos para mejorar la representación. Ya sea a través del voto anulado o el voto en blanco o el voto condicionado o el voto por Esperanza Marchita o una marcha multitudinaria o un frente común conformado por millones de mexicanos insatisfechos en busca de un catalizador para el cambio. Porque el voto “sin adjetivos” ya ha demostrado ser insuficiente; la competencia entre partidos ha demostrado ser insuficiente; la alternancia entre una opción ideológica u otra ha demostrado ser insuficiente.El problema no son las personas o los partidos; es un sistema político que no asume la representación como punto de partida, como cimiento fundacional. El problema es la inexistencia de mecanismos democráticos como la reelección, las candidaturas ciudadanas, las “acciones colectivas”, la revocación del mandato, entre tantas más. El problema es que los partidos insisten en que nos representan adecuadamente cuando no es así. No podemos seguir fingiendo; ha llegado el momento de reconocer lo que no funciona y componerlo. Porque como ha escrito José Antonio Crespo, votar por el partido “menos malo” equivale a comprar la fruta menos podrida, en lugar de presionar al vendedor a que —de ahora en adelante— venda fruta fresca. Equivale a decir que México no puede aspirar a más.
Y si, habemos muchos que creemos que éste país puede ser mejor de lo que ahora es y la realidad es que podemos ir más allá de lo que el actual sistema político ofrece.
Es por eso que en este día, el de la libertad de expresión, vale la pena hacer hincapié en que este es un derecho que todos poseemos. Y que hoy tenemos que defenderlo a toda costa, incluso de movimientos que pretendan coartar el derecho a expresar una opinión diferente en los medios de comunicación masiva en el caso del voto nulo. Y por supuesto no podemos olvidar que quien ha decidido no votar, abstenerse o incluso quien pretende ir a las urnas convencido de que tiene que votar por el menos malo, tiene todo el derecho a hacerlo y a expresar - por el medio que sea - esa intención si así le place. Nuestra libertad de expresión está también en juego en estos trascendentales momentos.
Así las cosas hoy domingo....
Salud pues......
2 comentarios:
Me parece que el voto nulo es el movimiento ciudadano de tiempos recientes que más ha ciscado a los partidos y a los políticos, a pesar de que es con mucho el de menor perfil (no tiene grandes campañas publicitarias, no tiene grandes manifestaciones públicas, no hay grandes acciones heroicas).
A ver qué pasa el 6 de julio.
¡Saludos!
Amo a Denise Dresser, así de plano, la amo. La admiro muchísimo, habla con toda propiedad, siempre tiene los mejores adjetivos en sus discursos, es promotora de la justicia en distintos ámbitos, es catedrática, en fin... ¿Sabes que hace unos días estaba yo preguntándome cuál sería su postura frente al voto nulo? Y fue precisamente ayer en tu facebook que leí esto que posteas acá y me dio mucho gusto.
Leí lo de la iglesia católica y sí se me hizo de lo más vil que estén opinando del tema. Con una calidad moral nula, y siendo harina de otro costal, no debieran meterse en cuestiones de caracter político nacional.
Está bien, no tiene valor jurídico la campaña... Pero está escuchándose nuestra voz, y está el IFE volteando hacia acá. Y las fuerzas políticas, y están creándose las condiciones para que pueda llegarse a un valor jurídico. Tiene que legislarse al respecto!!
Un abrazo Dave!
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