Si la premisa de que el deporte es un reflejo de la realidad nacional es cierta, lo que pasó el fin de semana pasado en la semifinal del fútbol mexicano entre el Morelia y el Cruz Azul es para preocuparnos a todos, incluidos por supuesto aquellos que no suelen seguir lo que sucede con el balompié nacional.
Y es que el domingo pasó de todo, aquí un recuento de lo sucedido, saquen ustedes sus conclusiones y piensen si el desmadre del sábado no fue un fiel reflejo de lo que pasa en nuestro país:
1- Un aficionado se mete al terreno de juego burlando a toda la seguridad del Estadio Morelos. Una vez más los encargados de la seguridad de la cancha brillan por su ausencia al momento de salvaguardar la integridad física de los protagonistas del espectáculo. Suele suceder, normalmente las policías andan en cualquier otra cosa menos en labores de protección que debería ser su máxima prioridad. La policía tarda en llegar a sacar al intruso, son los propios jugadores los que se encargan de llevarlo fuera de la cancha. Es arrestado, paga una multa de 30 pesos y sale libre como si nada hubiera pasado a pesar de haber sido el iniciador de la vergonzosa gresca del domingo pasado.
2- Christian "El Chaco" Giménez pierde la cabeza y en lugar de dejar que sea la autoridad la encargada de sacar al intruso, se va con todo en su contra, lo derriba e intercambia derechazos con él antes de que lo separen, es decir irresponsablemente toma la justicia en sus propias manos poniendo en peligro su integridad, la del aficionado y a la postre la de todos los jugadores.
4- Se arma una gresca en la que Cruzazulinos y Morelianos comienzan a pegarse con todo. La autoridad es rebasada y por momentos se convierte en mera espectadora de lo que está sucediendo. La policía - por lo visto en la TV - tarda mucho tiempo en entrar a poner orden, y no lo logra por si sola. Patadas y golpes por todos lados, incluso aparece un barbaján que la hace de portero llamado Jesús Corona quien le propina un artero cabezazo al preparador físico del Morelia. La autoridad jamás se da cuenta de este hecho y de no ser por que fue grabado por las cámaras de televisión nunca nadie se hubiera enterado.
5- Al final son expulsados "El Chaco", otro defensa del Cruz Azul y el jugador del Morelia Miguel Sabah quien - aparentemente - solo trató de separar a quienes se estaban golpeando o en todo caso, solo se defendió de alguna agresión de los jugadores azules. A Jesús Corona, nadie le toca hasta ese momento permanece de manera impune en el campo de juego.
6- Durante la narración del partido el comentarista Christian Martinolli utiliza expresiones racistas para referirse a los aficionados del Cruz Azul: aborígenes les espeta en un principio, parece darse cuenta de su error y trata de enmendarlo utilizando el calificativo de animales. Bonita enmienda.
7- Gracias a la toma televisiva, es entonces cuando la autoridad reacciona y castiga a Jesús Corona al cortarlo de la Selección Nacional. La TV vuelve a hacerla de Ministerio Público.
8- De acuerdo con el reglamento de la FEMEXFUT, los graves hechos del pasado domingo merecerían que el Estadio Morelos fuese vetado y que el Morelia pierda la oportunidad de jugar en su casa el primer duelo de la final contra Pumas. Pero el equipo es propiedad de TV Azteca, si esa televisora que dice ser la "Señal con Valor" pero el asunto parece valerle y si realmente Azteca estuviese interesada en promover "valores universales" ellos mismos debieron pedir que su estadio fuese sancionado por lo ahí ocurrido. Pero el valor más importante parece ser el dinero y el poder de la Televisora hace que la ley sirva para nada y el Morelos apenas y recibe una multa y una amonestación de veto. En otras palabras, el único poder que importa aquí es el de la Televisión.
9- El jueves todo estará olvidado. Morelia y Pumas van a jugar por la final y la televisión se encargará de hacer del partido una auténtica "fiesta". Los jugadores serán sancionados quizá con algunos partidos y regresarán el próximo torneo como si nada hubiera pasado. Finalmente hasta en estos casos la memoria histórica de los aficionados parece es completamente proporcional a la memoria televisiva.
10-Tendrá entonces que darse una tragedia mayúscula en un estadio para que la autoridad entonces reaccione. Si eso sucede, entonces comenzarán a respetarse los reglamentos, los estadios serán vetados y la ley se medio hará valer, claro hasta donde los intereses y el dinero permitan que la ley sea aplicada.
Lo acontecido el domingo pasado en el Morelos de la capital michoacana es un buen síntoma no solamente de como está el asunto del fútbol en México, sino también del grado de descomposición en el que se encuentra la sociedad actual. Se supone que el deporte tiene valores que engrandecen al espíritu humano: la competencia leal, la humildad en la victoria, la grandeza en la derrota, etc. Pero, por lo menos en el caso de nuestro balompié, solamente parece valer el poder del dinero.
¿Les suena esto familiar?...
Así las cosas hoy lunes...
PS...Dice Calderón que él se alzará con la victoria en su guerra contra el narco, tal y como Winston Churchill se alzó con el triunfo en la 2da. Guerra Mundial. Sergio Aguayo sin embargo apuntaba que la comparación debía ser con Neville Chamberlain, el ministro que antecedió a Churchill y que permitió el avance del nazismo y la masacre europea.
Salud Pues......
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