martes, mayo 06, 2008

De una excursión VHS....

Seven Readers!!!....

Una de las cosas que más disfruté del pasado puente, fue el realizar trabajo de archivo entre los viejos VHS que aún conservo en casa de mi madre. La razón: buscaba Sport Goofy, aquel filme en el que Tribilín (como le conocimos en México) nos daba lecciones de cómo practicar deporte. Encontré la cinta, la cual estaba acompañada de Tron (el antecedente en términos argumentales de películas como Ciudad Obscura y por supuesto Matrix) pero desafortunadamente se encontraba ya enmohecida y fue imposible rescatarla. 
Sin embargo al revisar los cassettes me encontré con auténticas “joyitas” como una versión bastante intacta de Pete’s Dragon, el final de Alcanzar una EstrellaII…(con Erick Rubín supuestamente ciego por drogas, y lanzando moralizantes, cursis y divertidos mensajes a la juventud) un gran concierto con Jeff Beck, Charlie Watts, Eric Clapton, Ray Cooper y Bill Wyman que supongo fue grabado en algún festival en Montreaux en los años ochenta e incluso una buena cantidad de vídeos netamente ochenteros de gente como DeBarge, Autograph o Klymaxx.
Pero lo más divertido y gratificante fue encontrarme con dos filmes en muy buen estado y cuya transición a DVD realizaré el fin de semana: The Barefoot Executive y The Neverending Story.
La primera es una película de 1971 protagonizada por un jovencito llamado Kurt Russell, otro joven John Ritter y el genial Joe Flynn (a quien tal vez recuerden como el ayudante de Peter Thorndyke en The Love Bug, la primera cinta con el gran Herbie). Trataba sobre un joven idealista que pretendía ser ejecutivo de Televisión en una cadena norteamericana y que lo logra gracias a la ayuda de Raffles, un simpático chimpancé que tenía la particularidad de elegir cuales serían los programas televisivos que serían un éxito garantizado. 






La premisa es realmente tonta, y quizá en si la película lo sea. Pero en eso recaía su mayor atractivo. Su ingenuidad era contagiosa y si de niño la disfrutaba intensamente, ayer al verla de nuevo no pude evitar encontrar un sentido irónico escondido detrás de esa aparente cortina de inocencia.
Y es que piénsenlo bien ¿un chimpancé que elige a los programas de mayor éxito? El mensaje “oculto” del filme es realmente hilarante: la televisión es tan idiota que es para gente con cerebro de mono. Fantástico ¿no? Créanme: con eso en mente, el filme resulta aún más divertido. Ignoro si esa era la intención de los productores o si no se dieron cuenta de lo que estaban diciéndole a la audiencia, pero la ironía me parece genial.
No recuerdo bien cual era el título en español, pero si la ven por ahí y quieren pasar un rato entretenido riéndose de la televisión para monos….vale la pena.

Con el paso de los años uno revalora a un filme como The Neverending Story. Realizada por el otrora gran Wolfgang Petersen (autor de dos maravillas: Das Boot y Enemy Mine, y que luego hiciera bodrios como Air Force One) la historia de Bastian, Atreyu y la tierra de Fantasía ha envejecido bien. Y lo ha hecho con base en el buen trato de su premisa y en la capacidad que tuvo Petersen para crear a un mundo realmente fantástico.
Tiene como base a la novela de Michael Ende (a quien por cierto nunca le gustó el resultado final de la película) que narra la historia de un niño, huérfano de madre, quien un día se encuentra con libro titulado La Historia Sin Fin. Libro que cuenta acerca de la tierra de Fantasía. Un mundo  que se encuentra amenazado por una misteriosa Nada que le va destruyendo. La emperatriz de Fantasía comisiona entonces a Atreyu, un joven cazador de búfalos, para encontrar la forma de vencer a la Nada y garantizar la existencia de su reino y sus habitantes. Desde el momento en el que Atreyu aparece, su destino se unirá invariablemente al de Bastián.



Ayudado de la música de Giorgio Moroder (que incluyó la famosa canción interpretada por Limahl) Petersen logró crear un filme de personajes entrañables que van desde los protagonistas hasta los animatronics como Falkor o Morla; y sobre todo me parece que existe mucha fidelidad al texto original de Ende sobre todo en esa hermosa moraleja que el filme posee: la Fantasía es lo que nos hace más humanos. Nuestros sueños generan esperanza y, como bien apunta la película, la gente que pierde la esperanza es más fácil de controlar. Gran verdad. 
Es por ello que la fantasía es maravillosa, por que de alguna manera explora todas esas cuestiones que en el fondo nos hacen ser mejores o peores seres humanos; además de que parte inherente de nuestra humanidad recae en nuestra capacidad de imaginación. El filme de Petersen nos recuerda todo esto, nos permite reflexionar en lo que hemos perdido y ganado como seres humanos capaces de soñar, de imaginar, de crear. 
The Neverending Story es otra de esas películas que tal vez se amó cuando niño y que siendo adulto, uno puede disfrutar más por que se comprende mejor el contexto y los subtextos encerrados en la historia. 

Aquí algunas de mis líneas favoritas del filme:

Falkor: Never give up and good luck will find you….

Bastian: Then, everything's been in vain. 
The Childlike Empress: No, it hasn't. Fantasia can arise anew, from your dreams and wishes, Bastian. 
Bastian: How many wishes do I get? 
The Childlike Empress: As many as you want. And the more wishes you make, the more magnificent Fantasia will become. 
Bastian: Really?

Engywook: Oh, that's what everyone thinks! But kind people find out that they are cruel. Brave men discover that they are really cowards! Confronted by their true selves, most men run away screaming! 

Atreyu: But why is Fantasia dying, then? 
G'mork: Because people have begun to lose their hopes and forget their dreams. So the Nothing grows stronger. 
Atreyu: What is the Nothing? 
G'mork: It's the emptiness that's left. It's like a despair, destroying this world. And I have been trying to help it. 
Atreyu: But why? 
G'mork: Because people who have no hopes are easy to control; and whoever has the control... has the power!


Y al final, podemos darnos cuenta de que nuestro paso por este mundo es realmente tan pequeño y tan grande como un grano de arena. Que ese grano es parte de una historia sin final, y que podemos contribuir con una milimétrica y gigantesca porción para que esta sea realmente una gran historia.

Así las cosas hoy martes….

ZAZ…largo post…

Salud pues…….

2 comentarios:

Rocker World Citizen dijo...

Extraordinaria pelicula "La Historia sin fin", automaticamente me has trasladado por el tunel del tiempo a 1985.
Giorgio Moroder fue un productor que hacia excelente música comercial esos dias (Limalh, Berlin, Donna Summer) y el tema de dicha pelicula es un chute de grandes recuerdos.
Por cierto, el niño actor de "la historia..."(creo que de apellido Brindis o Brandis) se suicidó hace aproximadamente una decada en otro caso de niños estrellas que crecen y no se ubican.
Saludos

marichuy dijo...

David

Tu, como Rodrigo, te echaste un viaje por el túnel del tiempo. "La historia sin fin" me encantó, es como el antecedente de Harry Potter ¿no?

La de Kurt Russell, ni idea.

De los Blockbusters veraniegos, pues a dejar de lado complejos adultos y disfrutar. "Ironman" se me antoja por el genial Robert Downey. Hace unos dos años que lo vi en el film de Jorgito Clooney "Buenas noches, buena suerte", lo pude adorar. Es un actor de exquisita tesitura histriónica y además, carismático.

Un abrazo