De una Reflexiva movie...

Seven Readers!!

Bueno…aquí estamos de nuevo, mis estimados e inteligentes seven readers. Lunes y como bien diría Supertramp:

Monday has come around again
I'm in the same old
place
With the same old faces always watching me
Who knows how long
I'll have to stay
Could be a hundred
years of sweat and tears
At the rate that I get paid

"Pero bueno…life goes on. El fin de semana estuvo excesivamente tranquilo. Me he dedicado a trabajar en mi proyecto de Tesis y a comer. Maldita sea!! Que rico he comido, tan rico que el sentimiento de culpa tuvo que luchar para aflorar en mí. Les cuento: sábado de camarones empanizados, domingo de arracheras. Calidad total. Hasta hoy por la mañana, pensé en que lo primero que tengo que hacer en Enero es regresar al ejercicio diario, a como de lugar, pero lo que el fin de semana solo trajo calorías y más calorías, y una felicidad increíble.
Eso si, me he dado el tiempo de ver una movie que les comento a continuación…

No Man’s land...

En los años noventa, el mundo se estremeció con las noticias que provenían de la región de los Balcanes. Una guerra en Europa había sido impensable sobre todo por que la caída del muro y la desintegración de la Unión Soviética, se habían dado de una manera más o menos pacífica. Sin embargo lo que sucedió en Yugoslavia, prácticamente tomó por sorpresa a la comunidad internacional, la cual no tuvo una rápida capacidad de reacción ante la monstruosidad de lo que sucedía en Serbia, Croacia y Bosnia Herzegovina. Un concepto definió al conflicto: limpieza étnica. Como en los peores tiempos de la Segunda Guerra mundial, el objetivo era terriblemente claro: borrar de la faz de la tierra al enemigo. Al cabo de los años, no se sabía exactamente como y quien había comenzado el conflicto, o si se sabía en realidad ello no era en si importante. Se trataba simplemente de llevar al extremo a las sinrazones de la guerra.

En No Man’s Land (Tierra de nadie) el director de origen Bosnio Danis Tanovic, presenta un retrato de esa guerra a partir de una situación en particular. Tres soldados, dos Bosnios y un Serbio, se quedan atrapados en una Trinchera ubicada en un terreno “neutral” es decir justo entre los frentes Serbio y Bosnio. Los tres tienen que tratar de encontrar la manera para sobrevivir, aunque existe un problema adicional: uno de ellos queda acostado sobre una Mina terrestre de fragmentación cuya manufactura es norteamericana. Los tres tienen que tratar de hallar la manera de salir del problema. Descubrirán que tienen varias cosas en común, pero al mismo tiempo lo insano del conflicto les terminará afectando de manera irremediable.
Tanovic tiene la capacidad de generar una situación realmente absurda, y a partir de ella reflexionar sobre lo absurda que es en si la guerra. La trinchera es en si misma un ejemplo de lo que fue la guerra de los Balcanes: una región de nadie y de todos a la vez, en la que nadie parece tener la capacidad ni la voluntad para resolver el conflicto, un ejemplo: la incapacidad de las Naciones Unidas para encontrar una salida al problema (tal y como sucedió en ese entonces, y como ha sucedido en muchas conflagraciones bélicas posteriores a la creación del organismo) y la voracidad de los medios de comunicación por hacer de la guerra un espectáculo, sin informar realmente con un sentido crítico y humano sobre la brutalidad del conflicto.
En términos formales la película es sencilla: La planificación recurre sobre todo a los planos medios y a los primeros planos para tratar de involucrarnos en la psicología de los personajes y crear también una sensación de claustrofobia e impotencia. Los diálogos son inteligentes y es evidente que en ellos Tanovic busca denunciar los acontecido en su propia tierra. Pero curiosamente su visión no es en sí la de uno de los bandos, sino que pretende contarnos las cosas desde diversos puntos de vista: el de los serbios, el de los bosnios, el de la ONU y el de la prensa; para que al final, sea el espectador quien genere un punto de vista propio sobre el conflicto de los Balcanes en particular, y la guerra en general.
Esta película ganó el Oscar como mejor película extranjera en 2001. Venció a la popular y estilísticamente impecable Amélie. Después de ver No Man’s Land, uno tiene que reconocer que en este caso La Academia no se equivocó, pues aunque Amélie es una película magistralmente construida, no tiene la capacidad de reflexión, ni de condena que si encontramos en el filme de Tanovic.
No Man’s Land es un poderoso documento que sirve como un ejemplo de que con pocos recursos, realmente puede construirse un discurso fílmico que lleve al cine más allá del mero entretenimiento.
Búsquenla en su Video Club Favorito.

Así las cosas hoy lunes…

PS1…¿Quieren iniciar la semana indignados? Vayan a La Jornada y lean el reportaje sobre Rebel Norbert y la pederastia. Solo un párrafo: “"Ustedes olvidarán pronto lo que les hizo el padre Nicolás Aguilar Rivera. Al rato, ya ni se acordarán. Deben saber perdonarlo. El padre es un hombre enfermo". Con esta frase el cardenal Norberto Rivera Carrera, arzobispo primado de la ciudad de México, intentó convencer a las víctimas del cura pederasta para que guardaran el secreto y no acudieran a las autoridades a denunciarlo, luego de que el presbítero violó a más de 60 niños de la Sierra Negra de Puebla”…
Y la cosa sigue…

PS2…¿Quieren iniciar la semana con un poco de alegría? A pesar de todo…Chivas va a la repesca. Habrá que vengar la afrenta cometida hace un par de semanas por el Veracruz.

Salud pues..…