Goodbye Friends

En los tiempos actuales es sumamente complicado que un programa de televisión pueda mantenerse por largo tiempo al aire. Son pocas las excepciones que confirman la regla. Cuando un programa logra hacerlo, es por que se trata de un fenómeno que traspasa lo televisivo para convertirse en algo eminentemente social. Friends fue uno de esos programas.
En 1994, cuando el programa ve la luz, los entonces post adolescentes de la generación X, inmediatamente hicieron contacto con él. Surgió una química especial entre Friends y Su audiencia. Los jóvenes de todo el mundo se identificaron con el grupo de amigos clase medieros neoyorkinos cuyo desarrollo dramático y personal fue inmediatamente identificado como propio por los miles de jóvenes que semana a semana comenzaron a seguirlos. Ross, Chandler. Mónica, Phoebe, Joey y Rachel; se convirtieron en visitantes asiduos en millones de hogares alrededor del mundo.
En un principio Friends Triunfó por las temáticas presentadas en cada capítulo de la serie. Se presentó de entrada un nuevo modelo de Familia. La familia tradicional fue sustituida por una nueva: la de los amigos. Sustitución natural, pues los personajes de la serie venían de familias completamente disfuncionales y crean a partir de su amistad un nuevo nicho familiar. A esto hay que añadir, que la comedia trató temas considerados ajenos a un programa de tono cómico. Se habló de Lesbianismo, infertilidad, madres sustitutas, infidelidad, discriminación, travestismo, relaciones interraciales, desempleo y cuestiones con a las que los jóvenes de la generación post noventas se enfrentaron día a día. De ahí, el enorme éxito de la comedia.
Con un guión estupendamente escrito, sobre todo en sus primeras 6 temporadas, y con actores que proyectaban una química especial en pantalla, la serie llegó a su final el pasado mes de mayo. En Latinoamérica lo vimos el martes pasado, y aunque todos sabemos de alguna manera en que terminaría, el programa tuvo buenos niveles de audiencia para haberse transmitido en un canal por cable. Este punto nos remite a otra cuestión muy importante: Friends fue un programa que en nuestro continente en general, y en México en particular, fue enormemente popular gracias a la televisión de paga. De ahí comenzó el fenómeno que vivimos hoy en día, en el sentido de que la televisión abierta ha dejado de importar series, y las series extranjeras que han sido exitosas en nuestro país son gracias a los sistemas de TV de paga.
El capítulo final no fue precisamente una maravilla o uno de los mejores, pero si tuvo un enorme dejo de nostalgia. Una sensación de que cuando la puerta del departamento de Mónica se Cierra por última vez, también se cerraba un capítulo muy importante en la historia de toda una generación que creció junto a los integrantes de Friends.
Pero también con el final, parece ser que termina toda una era en la televisión mundial. Es el adiós a las grandes comedias de situación. La ficción parece ceder ante la supuesta televisión real. Los realitys se apoderan del prime time que anteriormente pertenecía a los grandes dramas o a las fantásticas comedias. Hoy, lo “Real” se ha apoderado de nuestras pantallas y parece que no irá por un buen tiempo.
Se va pues Friends. Claro que, la serie continuará por siempre en repetición, pero extrañaremos saber que pasará con la vida de 6 amigos que de alguna manera se convirtieron en parte importante de nuestra propia existencia. Adiós friends y nos veremos siempre en Repetición.